sábado, 1 de octubre de 2016

Pequeñas cosas

   Una vez más, entre el desánimo de la monotonía, el cansancio que me abate, la realidad que me aleja de la fantasía... cada día más. Esas cosas diminutas, que casi nadie aprecia y para mí son un mundo, me sacan una sonrisa y una esperanza. Y siento que lo imposible ya no lo es tanto, que perseverar tiene al fín su recompensa.
   No quiero grandes cosas, el detalle más pequeño, solo ese, que te hace sonreir cuando más lo necesitas.
   La distancia no existe sino entre quienes quieran crearla. Tan lejos, tan cerca... nuestra mente pone medida a esa distancia, a veces es tan nula que casi sientes la proximidad, oyes sus pasos, hueles su perfume. Con cada pequeña cosa revives de nuevo esa sensación, esa conexión que perdurará siempre.